Argentina medalla de bronce masculino en BVP Lima 2019

Lima, 30 de julio del 2019. La imágenes de Julian Azaad corriendo hacia las graderías a abrazar a sus padres y Nicolás Capogrosso, dejándose caer en la arena, con las manos en su rostro cubriendo las lágrimas, quedarán por una eternidad guardadas en las memorias de los asistentes a las finales del voleibol de playa de los Juegos Panamericanos de Lima 2019.

Azaad y Capogrosso ganaron la medalla bronce del voleibol de playa masculino de los XVIII Juegos Panamericanos al vencer 2-0 (21-17, 21-18) a Canadá (Aaron Nusbaum/Michael Plantinga).

Emocionantes jugadas defensivas, fuertes bloqueos y remates contundentes de ambas partes se disfrutaron en el Estadio de Costa Verde, con cientos de aficionados disfrutando de la última jornada.

Después de un primer set a favor de Argentina con una ventaja cómoda, Canadá tomó ventaja 9-3 en el segundo set, pero Argentina reaccionó empatando 10-10 y de ahí en adelante manejó el juego a su conveniencia, manteniendo una ventaja de tres puntos.

Para Nicolás, fue la oportunidad de darle un regalo de cumpleaños a su mamá, quien estaba en las graderías. “Mi vieja ayer me escribió, me preguntó como estaba, le dije bien ma, me voy a recuperar y te voy a hacer un buen regalo de cumpleaños y este es el regalo. Es único que ella esté acá y se lo pudiera hacer dedicado”, comentó.

Capogrosso agregó “es increíble cómo te da revancha el deporte, hace cuatro años perdíamos en cuartos de final en Toronto, y hoy haber ganado la medalla es un premio a todo el sacrificio y el trabajo que venimos haciendo. Es uno de los objetivos que nos propusimos con Juli cuando arrancó esto. No lo puedo creer, hay muchas cosas detrás, mucho esfuerzo, muchos cumpleaños perdidos, muchos asados perdidos”.

Julián Azaad: “Creo que no nos caímos en toda la competencia. Lo de México (derrota en semifinales) fue puro mérito de ellos, jugaron muy bien, pudimos haber cometido un par de errores, pero son comunes en estos partidos. Hay situaciones que intentan poner presión, pero la más grande es la ganas de subirse al pódium, el deseo y lo lindo de eso”.